¡CONTRA EL PREACUERDO DE LAS PENSIONES!

Las cúpulas negociadoras de esos sindicatos se han entregado sin la mínima lucha a las pretensiones gobierno del PSOE, y de quienes como CiU y el PP votaron o se abstuvieron en el Congreso ante las recomendaciones regresivas del Pacto de Toledo.
Los dirigentes sindicales han hecho oídos sordos a las opiniones y rechazo de sus propios afiliados, de la mayoría de la clase obrera, de  amplios sectores ciudadanos y de las organizaciones de la izquierda social y política, con gran menosprecio además a los muchos trabajadores  que se han movilizado ya en defensa de las pensiones o que precisamente hoy, 27 de enero, secundan huelgas y jornadas de lucha  en protesta contra la política social y económica del gobierno y la reforma de las pensiones.
Cuestiones tan vitales como la edad de jubilación, la determinación de la base de las pensiones y los derechos por años cotizados han sido pulverizados en una mesa de negociación casi clandestina y a espaldas de todos los trabajadores. La división que han provocado las cúpulas negociadoras de CCOO y UGT  en el conjunto de la izquierda y el descrédito a que están sometiendo a sus sindicatos serán una pesada carga en los tiempos próximos, en unos momentos en que el gobierno y la derecha pretenden imponer a las  capas sociales más vulnerables, débiles y desprotegidas la crisis económica.
Socialismo 21 llama a todas los partidos, organizaciones y movimientos de la izquierda – y a todos los  ciudadanos sensibles a los abusos y agresiones del gobierno- a participar en las movilizaciones del día de hoy para rechazar el  pacto alcanzado, y a recrudecer la lucha a partir de mañana, por todos los medios de protesta, con los objetivos de impedir, si es posible, la firma definitiva del pacto y reforzar la resistencia social. 
Asimismo hacemos un llamamiento a los miembros de los órganos de dirección de CCOO  y UGT en todos los ámbitos para que, recogiendo el sentir generalizado de los trabajadores, rechacen los acuerdos alcanzados y levanten dentro de su sindicatos una oposición firme y consecuente a la línea sindical emprendida, que, no hace falta decirlo, lleva a la ruina del movimiento sindical en unos momentos en que la unidad de la izquierda y su firmeza son imprescindibles para afrontar estos tiempos de reacción y crisis.

¡POR LA DEFENSA DE NUESTROS DERECHOS Y LOS DE NUESTROS HIJOS!

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